Continúan los despidos masivos en las grandes tecnológicas. La última en sumarse ha sido Dell, que planea decir adiós al cinco por ciento de su fuerza laboral, lo que significa que unos 6.650 empleados dejarán sus puestos.
Los recortes anunciados por Dell se producen en un momento en el que la demanda de ordenadores de sobremesa y portátiles se ha desacelerado a nivel mundial. En concreto, los envíos globales de PC cayeron un 28 por ciento en el cuarto trimestre de 2022, aunque las cifras de Dell fueron superiores, alcanzando el 37 por ciento de caída durante ese mismo periodo.
Jeff Clarke, codirector de operaciones de Dell, ha explicado en un memorando a sus trabajadores que los recortes se hicieron en un esfuerzo por “anticiparse a los impactos de la recesión”. Asimismo, ha explicado que las medidas que había tomado la compañía para la reducción de gastos, como la limitación de los viajes, la paralización de la contratación externa o la reducción del gasto en servicios externos, no eran suficientes.
Clarke ha aseverado que “desafortunadamente, con cambios como este, algunos miembros de nuestro equipo dejarán la empresa”, añadiendo que “no hay una decisión más difícil, pero una que tuvimos que tomar para nuestra salud y éxito a largo plazo”.
Dell contaba con 133.000 empleados a finales de enero de 2022.
La compañía se suma así a otras grandes tecnológicas, como Google, Amazon o Meta, que han tenido que realizar despidos masivos ante la recesión y la falta de demanda tras el aumento de la misma durante la pandemia por el coronavirus.