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Las decisiones que está tomando el multimillonario Elon Musk no sólo afectan a Twitter, sino que también al resto de sus empresas. En esta ocasión, el magnate ha decidido vender otro paquete de acciones valorado en más de 3.500 millones de dólares de su compañía Tesla, lo que significa la segunda ronda de venta desde que compró la red social por 44.000 millones de dólares.
Una presentación de valores de Estados Unidos mostró que Elon Musk descargó 22 millones de acciones en el fabricante de automóviles más valioso del mundo durante tres días, de lunes a miércoles.
Esta sería la segunda venta de acciones más importante de Tesla que se produce desde que Elon Musk asumió el poder de Twitter el pasado octubre. Eso sí, no se sabe si esta venta de acciones de Tesla tiene que ver con la adquisición de la red social de microblogging, pero desde Reuters indican que los inversores parecen estar un poco molestos por la situación al considerar que Musk está desviando su atención y recursos a Twitter antes que a Tesla.
Hay que recordar que la participación del 13,4 por ciento de Musk en Tesla es inferior al 17 por ciento de hace un año.
El precio de las acciones de Tesla se ha reducido a la mitad este año, aunque la venta de dichas acciones ha llevado a conseguir unos 40.000 millones de dólares a Elon Musk.
La fortuna de Musk, mayoritariamente ligada a las acciones de Tesla, ha caído con los precios este año. De hecho, el magnate perdió brevemente su título de persona más rica del mundo la semana pasada, según la lista de Forbes, cuando fue superado por el jefe de Louis Vuitton, Bernard Arnault.
Además de Tesla y Twitter, donde la gestión de Elon Musk está dando más de un quebradero de cabeza, el magnate también dirige la empresa de cohetes SpaceX y Neuralink, una startup que desarrolla interfaces para conectar el cerebro humano con los ordenadores.
Pero Tesla está teniendo algunas dificultades, ya que el pasado octubre indicó que no podría cumplir con su objetivo de entrega de vehículos de este año.
La última venta de acciones se produce un mes después de que Musk vendiera acciones por valor de 4.000 millones de dólares en los días posteriores al cierre del acuerdo con Twitter.
