Nokia ha decidido dejar de operar en Rusia, convirtiéndose así en una de las empresas internacionales que han abandonado el país tras la invasión rusa a Ucrania. Esta decisión afectará a unos 2.000 empleados que perderán su trabajo.
Nokia se suma así a una lista de cientos de empresas extranjeras que están cortando lazos con Rusia después de que empezara la invasión de Ucrania el pasado 24 de febrero y después de las sanciones occidentales contra Moscú.
A pesar que algunos sectores como el de las telecomunicaciones han sido exentos de algunas sanciones por motivos humanitarios, Nokia dijo que había decidido que abandonar Rusia era la única opción.
El presidente ejecutivo de Nokia, Pekka Lundmark, ha indicado en declaraciones recogidas por Reuters, que “simplemente no vemos ninguna posibilidad de continuar en el país en las circunstancias actuales”.
Eso sí, ha prometido que la compañía continuará apoyando a los clientes durante su salida y que no podía decir cuánto durará la retirada de la misma en el país.
Nokia no cree que esta decisión afecte a su previsión para este año, pero la compañía afirmó que tendrían que hacer frente a un impacto de unos 100 millones de euros.
Nokia se suma así a otras compañías del sector de las telecomunicaciones como Ericsson que también anunció la suspensión indefinida de su negocio en Rusia.
Lundmark ha indicado que Nokia no implementará un plan anunciado en noviembre para establecer una empresa conjunta con YADRO de Rusia para construir estaciones base de telecomunicaciones 4G y 5G.
La decisión de dejar Rusia afectará a unos 2.000 trabajadores de Nokia, que cuenta con una fuerza laboral de unos 90.000 empleados a lo largo de todo el mundo.