Una empresa china acaba de lanzar al espacio un prototipo de robot que podrá recoger los escombros dejados por otras naves espaciales gracias al uso de una gran red.
El robot, bautizado como NEO-01, fue lanzado en el cohete Long March 6 del gobierno chino junto con unos cuantos satélites, ha informado Reuters.
El robot, que sólo pesa 30 kilos ha sido desarrollado por Origin Space, con sede en Shenzhen, China, tiene como objetivo también el allanar el camino para futuras tecnologías capaces de extraer asteroides.
NEO-01 usará una red para capturar los desechos y luego quemarlos con su sistema de propulsión eléctrica, según ha informado la compañía en su web.
Y es que el espacio está lleno de basura espacial, ya que miles de satélites se han lanzado a lo largo de los últimos años y que se han ido convirtiendo en basura, lo que representa un peligro para otros satélites que están todavía operativos.
Origin Space tiene la intención de lanzar docenas de telescopios espaciales y más naves espaciales para así lograr la primera extracción comercial de asteroides para 2045, según ha indicado el fundador de la compañía Su Meng en una entrevista que tuvo lugar a principios de abril con medios chinos y que han sido recogidos por la agencia estadounidense.
China está trabajando muy duro en la carrera espacial con la intención de alcanzar a los todopoderosos Rusia y Estados Unidos con la intención de transformar a China en una gran potencia espacial para 2030.