Foto: Abel Rojas/PanamericanWorld
Con Rafael Martínez, cofundador y director ejecutivo de ConWiro, el primer estudio independiente de videojuegos en Cuba, Todostartups conversó hace dos años. Desde entonces, marcan una pauta “porque una vez que ConWiro o cualquier estudio de animación alcance algún tipo de éxito, eso va a motivar y otros se sumarán”.
Este 1 de marzo entran a la historia del videojuego cubano, pues serán el primer estudio que logró monetizar mediante micropagos un videojuego, en este caso, La Pira.
¿Qué ha sucedido con ConWiro en estos dos años?
En todo este tiempo hemos estado haciendo bastantes cosas, trabajando en proyectos nuestros y para terceros para poder mantener las operaciones, en lo que hacíamos algunos trabajos íbamos adelantando en La Pira, en su versión demo, que se desarrolló en solo un mes, tuvo gran aceptación por el público: más de 30 mil descargas en Apklis, críticas favorables, además de estar seleccionado entre los mejores videojuegos cubanos del 2020 por el medio Juventud Técnica.
Otras de las cosas importantes que nos sucedieron en este tiempo fue poder participar en GameCamp organizado por Google Startups de Varsovia además estuvimos invitados a GIC (Game Industry Conference), en ambos pudimos aprender bastante de cómo funciona la industria, lo importante que es la colaboración entre toda la comunidad para salir adelante independiente de que sean competidores comerciales.
Todas esas experiencias las tomamos prestadas y estamos trabajando para que sean valores que estén presente en la comunidad de creadores de videojuegos que estamos tratando de potenciar, de eso te comentaré más adelante, se me olvidaba que hicimos muy buenas conexiones que aún mantenemos, también nos divertimos bastante.
Hago hincapié en nuestro viaje a Polonia porque fue algo que nos marcó bastante, al estar trabajando en un sector con muy poco desarrollo en Cuba, donde existen grandes vacíos de información que solo pueden ser llenados mediante el intercambio con personas de la industria.
Este 1 de marzo, se estrena La Pira, y pasarán a la historia como el primer estudio independiente que logró monetizar mediante micropagos en Cuba, ¿Cómo han llegado hasta aquí?
El otro día estaba escribiendo algo respecto a lo que nos ha permitido llegar a donde estamos hoy, “Cuando eres perseverante y tienes una visión clara de hacia dónde quieres llegar puedes estar seguro que podrá lograr lo que te propongas”.
Todo se resume en perseverancia y visión, lo demás es cuestión de tiempo. En ConWiro nos motiva poder llevar el desarrollo del videojuego cubano al más alto nivel, tratando de resaltar en el panorama nacional e internacional además de ser fuente de motivación para la comunidad de desarrolladores y artistas de la región.
¿Cuál es la propuesta de La Pira y por qué debemos correr a descargarla?
Algunos de los aspectos importantes que hemos tenido en cuenta para su producción son, por un lado, el trabajo del arte Cartoon estilizado con un aspecto entre look cartoon y una dirección de arte realista, que de manera indirecta transmita aspectos de nuestra identidad.
En comparación con la versión demo agregamos una variedad de carros normales y especiales que pueden ser mejorados y personalizados en el garaje, una tienda de poderes, diferentes biomas, así como una diversidad de obstáculos y mecánicas de diseño nuevas. Algo que no podía faltar es la competición online, una de las características que marcó positivamente el demo, esta vez con varios modos de competencia, aunque empezaremos alternando solo dos: el clásico de alcanzar la mayor cantidad de kilómetros y el de lograr un máximo de kilómetros sin chocar.
¿Cómo se protegen los datos y la privacidad de los usuarios? ¿Tienen políticas al respecto?
Nos regimos por los estándares internacionales de protección de datos, el juego además está clasificado según PEGI (Pan European Game Information) este hace referencia al sistema de clasificación por edades para software y videojuegos aplicado en Europa para informar y aconsejar a los padres sobre el contenido del material interactivo que adquirían para sus hijos.
La Pira tiene una clasificación PEGI 3: es la etiqueta que se utiliza en los juegos adecuados para todas las edades. Estos no deben contener palabras malsonantes, contenido que pueda asustar a los pequeños ni personajes que puedan ser identificables en la vida real.
¿Cómo han sido las relaciones con las empresas estatales?
Según mi experiencia lo que sucede en las empresas estatales es interesante, existe un conflicto entre el miedo a lo nuevo y el deseo de hacer cosas nuevas. Nuestra experiencia ha sido dura primero por ser los primeros y esto no pone en la situación de que no existe precedente.
Segundo porque hemos tenido que esperar por 8 meses, trabas burocráticas, además de cursar una pandemia en el cual muchos servicios estaban cerrados, pero en sentido general, hemos dado con personas que quieren hacer las cosas diferentes y sacar adelante la colaboración entre privados y estatales. Lo que está haciendo ConWiro hoy es un ejemplo.
Comentaste que están abriendo una puerta para la comunidad de creadores de videojuegos, ¿Cómo fomentarla? ¿Hay otros estudios como ustedes? Y, ¿se puede hablar de una industria cubana de videojuegos?
Como nosotros existen otras personas que sueñan vivir de hacer lo que le gusta (videojuegos), la comunidad la inicié con la ayuda de varios de los colegas que compartíamos la misma visión de crear un espacio de todos, donde cualquier persona que esté vinculada de manera directa o indirecta con el desarrollo de videojuegos pudiera compartí sus experiencias, colaborar, encontrar puntos débiles y revertirlos en aras de hacer crecer el videojuego cubano sin importar si eres independiente, de una institución, empresa estatal, universidad, programador, artista, guionista, periodista, músico y lo más importantes en mi opinión es poder lograr asentar las bases y los valores que marcaran el desarrollo del videojuego cubano.
La mejor manera poder fomentar esta comunidad es lograr que los creadores puedan nutrirse de la experiencia y conocimientos de personas, instituciones, fundaciones que están involucrados en la industria a nivel internacional. De ahí cuán importante fue nuestro viaje a Polonia y como cambió la manera de ver los videojuegos. Existen varios grupos haciendo proyectos muy interesantes y otros con muchos deseos de poder lograrlo.
Nosotros con La Pira estamos cerrando un ciclo que dentro de poco vamos a compartir a la comunidad de manera que cualquiera que quiera fundar un estudio pueda seguir nuestra hoja de ruta para crear un estudio de videojuego en Cuba de manera legal.
Creo que estamos en buen momento para asentar las bases de una industria, pero en opinión no podemos hablar de una industria de videojuegos.
¿Cuáles son las principales trabas para el desarrollo de emprendimientos de base tecnológica en Cuba? ¿Cómo sortearlos?
Las trabas todos las conocemos: burocracia, altos costos de internet para los usuarios, ausencia de fondos de riesgo para emprendimientos de alto riesgo, un marco legal débil para los emprendimientos además de una mentalidad obsoleta que estamos cambiando, pero no al ritmo de crecimiento que amerita la situación actual.
Aunque estemos abriendo el paso a una comunidad creo que cada cual debe encontrar su propio camino, pero si pudiera definirte a ConWiro cómo lo hemos hecho, en pocas palabras te diría que: “Somos perseverantes y sabemos nuestro destino”.