Por Redacción - Jun 24, 2020
En una situación económica como es la actual, muchos emprendedores buscan nuevos mercados a la hora de invertir, al igual que nuevos sectores alejados de los tradicionales. Por este motivo, algunos como el mercado de las criptomonedas es uno de los más atractivos para muchas personas. Pero para ello, es muy importante saber cómo funcionan las transacciones que se realizan en la economía digital o virtual, el IOTA.
Lo primero sería explicar qué es IOTA, y no es más que el primer libro mayor distribuido o ledger distribuido para el Internet de las Cosas, un concepto que se está implantando cada vez más rápido en nuestra vida diaria, ya que grandes empresas de las telecomunicaciones y de los electrodomésticos están apostando por ello.
Además, IOTA es una red para el intercambio del valor y los datos entre humanos y las máquinas. En otras palabras, la base de la contabilidad en el mundo digital y de una forma mucho más avanzada, donde, entre otras cosas, se guardan en una gran base de datos toda la información de los participantes de forma individualizada. La criptomoneda que utiliza IOTA es MIOTA, la cual se puede usar sin ningún problema para operar en la red.
Recordamos que el de las monedas virtuales es un mercado en el que muchas personas ven un aliciente pese a tener cierta volatibilidad. Sin embargo, en contextos económicos en el que los mercados tradicionales ofrecen unos márgenes de beneficios mínimos o están en pérdidas, como es lo que estamos viviendo en los últimos meses con la crisis del coronavirus en el que el IBEX-35 pasó de los 10.000 a los 6.000 puntos, hay quienes consideran que las criptomonedas son una forma de conseguir dinero más segura y, sobre todo, más rápida.
Y es precisamente a esa volatilidad la que permite que muchas personas sepan vender en situaciones en la que los picos son mucho más elevados que en el momento de la compra. También hay muchas startups que ven en estos mercados una forma más sencilla de adquirir capital o invertir.
Sin embargo, es cierto que en ocasiones los potenciales inversores no saben muy bien por cuál decantarse, ya que son varios los tipos de monedas virtuales que hay en el mercado y no todas tienen ni el mismo valor ni el mismo resultado a la hora de invertir.
Una de los grandes atractivos de IOTA son los apoyos con los que cuentan para realizar proyectos especialmente bajo la filosofía del código abierto, como Jaguar-Land Rover, Dell, Edag, Engie Lab o Trade Mark, Bosch, Fujitsu, Farmforce, Philips entre otros, lo cual da una gran solvencia y confianza a la hora de invertir.
Por las características que tiene el mercado de las criptomonedas, los últimos estudios publicados por el portal especializado 2gether revelan que el perfil de los inversores en este tipo de mercados es un perfil joven y muy vinculado con el sector tecnológico. Entre alguno de los datos a destacar, por ejemplo, está que el 55 por ciento de este tipo de inversores tiene entre 26 y 45 años. De ellos, un 31 por ciento pertenecen a la ‘generación X’ y un 25 por ciento serían millennials.
La gran mayoría tienen estudios universitarios donde profesiones como abogados, economistas o contables son las predominantes, representando un 15 por ciento del estudio, seguido de estudiantes y operarios y transportistas. Sin embargo, altos ejecutivos solo representan un 8,5 por ciento. Respecto a la diferencia entre hombres y mujeres, es muy notable la diferencia, ya que el 77 por ciento de los inversores son varones.
Los sectores en los que se utilizan son cada vez más variados, lo cual nos quiere decir que cada vez hay más empresas que se decantan por este tipo de monedas para recibir los pagos por sus productos y servicios. Así, casi un 33 por ciento sería el sector de los restaurantes y hoteles, el 19 por ciento alimentación y supermercados y casi un 12 por ciento tanto las comunicaciones como el transporte.
Con todos estos datos, podemos decir que cada vez hay más sectores que confían en las monedas virtuales para hacer los pagos ordinarios, especialmente entre el público más joven y que puede considerarse o bien nativo digital o gran aliado al mundo de Internet.