Uber, la compañía de transporte bajo demanda, está haciendo cambios en su fuerza laboral, ya que ha anunciado el despido de unos 400 empleados en el área de marketing, lo que significa la pérdida de alrededor de un tercio de sus trabajadores, que se contabilizan en unos 1.200 en este departamento.
La firma estadounidense ha informado en un comunicado que la decisión de este despido se debe al proceso de reestructuración que están llevando a cabo desde que Uber salió a Bolsa el pasado 10 de mayo.
El consejero delegado de Uber, Dara Khosrowshahi, ha indicado que la intención es “recuperar nuestra ventaja”, explicando que sus equipos “son demasiado grandes, lo que hace que se duplique el trabajo”, justificando así esta decisión.
Esta noticia ha salido a la luz sólo unas semanas después de que dos altos directivos de Uber abandonaran las filas: el jefe de operaciones, Barney Harford, y la jefa de marketing, Rebecca Messina, que argumentaron en ese momento que dejaban sus puestos por motivos de reestructuración.
Khosrowshahi pasó a reemplazar a Harford al indicar que tras la salida a bolsa de Uber tenía más tiempo para implicarse en el día a día de la compañía. Por su parte, el directivo explicó la salida de la jefa de marketing argumentando que para “nosotros es crucial tener una narrativa consistente y unificada hacia los consumidores, la prensa, los socios y los políticos”. De hecho, desde entonces Uber combinó las unidades de marketing, comunicaciones y política, por lo que el puesto que ocupaba Messina desapareció y se integró en un departamento dirigido por Jill Hazelbaker, que era la vicepresidenta de comunicaciones y políticas públicas.
