La suspensión de Uber en la ciudad de Viena después de la decisión judicial del Tribunal Comercial de la ciudad austriaca sólo ha durado al final un par de días ya que e servicio de transporte se ha ajustado a la normativa local.
Según ha explicado un portavoz de Uber en unas declaraciones recogidas por Reuters, la compañía se ha adaptado a la normativa local en la que se establece que los conductores de esta empresa no pueden recoger clientes por cuenta propia cuando están circulando por la ciudad, ya que eso es algo que sólo lo pueden hacer los taxistas locales. Por eso, la compañía ha asegurado que ha adaptado el proceso de petición de servicio de los clientes para que así se ajuste a la normativa vigente.
Uber se encontró en dificultades la semana pasada cuando el Tribunal Comercial de Viena decidió la suspensión del servicio tras la queja presentada por la empresa de taxis Taxi 40100 que aseguraba que el servicio de transportes violaba las normas del servicio de transporte para el que tiene licencia.
Parece que la compañía de servicio de transporte se libra así de otro de los problemas que lleva sufriendo en varias ciudades europeas donde no se ve con buenos ojos la presencia de sus conductores en las calles debido a la denuncia de las compañías de taxis que consideran el servicio una competencia desleal, ya que sus conductores no cuentan con la licencia considerada imprescindible para realizar su servicio en las calles de la ciudad.
