La construcción de la marca personal pasa por la planificación de una estrategia en la que se marcan unos objetivos determinados. En la mayoría de los casos de éxito, esta estrategia ha sido pensada, planificada y definido hasta el más mínimo detalle. Por tanto, es importante establecer etapas para la consecución de los objetivos que deben ser debidamente pensadas y planificadas.