Bill Gates es conocido mundialmente no sólo por fundar Microsoft, sino por su función filantrópica que va más allá de la tecnología y que normalmente va destinado a mejorar la sociedad en cualquier aspecto. Pues bien, Gates ha decidido invertir en una startups que trabaja en un proyecto que tiene como objetivo trabajar en una nueva dieta para las vacas y así reducir las reducciones de emisiones de efecto invernadero producidas por sus eructos.
En concreto, el magnate, a través de Breakthrough Energy Ventures (BEV) ha liderado una nueva inversión de 12 millones de euros en una startup australiana llamada Rumin8, que se encarga de desarrollar un pienso a base de algas marinas que reduce las emisiones de metano que producen las vacas a través de sus eructos.
La nueva alimentación incluye algas rojas y plantas de pastizales que replican “el compuesto antimetanogénico de la naturaleza” y reducen la producción de metano.
El metano es el gas de efecto invernadero más común después del dióxido de Carbono. El ganado, como las vacas, cabras y los ciervos, producen metano cuando sus estómagos descomponen las fibras duras como el pasto para la digestión. El proceso de fermentación que se produce crea gas metano que luego se vuelve a expulsar en su mayor parte.
Estudios universitarios han demostrado que alimentar a las vacas con algas puede reducir significativamente sus emisiones de metano.
Y eso es precisamente a lo que se dedica Rumin8, una startup con sede en Perth, Australia, que trabaja en un suplemento dietético, replicado sintéticamente a partir de algas rojas, que detiene la producción del gas.
Esta empresa, según ha informado en un comunicado, ha recaudado 12 millones de dólares en una ronda de financiación liderada por Breakthrough Energy Ventures, compañía fundada por Bill Gates en 2015. Esta inversión también ha estado respaldada por el director ejecutivo de Amazon, Jeff Bezos, y el empresario chino y cofundador de Alibaba, Jack Ma.
El director general de Rumin8, David Messina, ha indicado en un comunicado que “estamos muy satisfechos con la recepción que hemos recibido de los fondos de impacto climático en todo el mundo”, añadiendo que “existe un deseo genuino de financiar soluciones para las emisiones de meta entérico del ganado”.