Cuando se habla de startups, siempre se piensa en unos emprendedores jóvenes que se arriesgan para poner en marcha su negocio, teniendo entre sus trabajadores a personas jóvenes también que se involucran en el proyecto empresarial al cien por cien. La inclusión y la diversidad es muy tenida en cuenta por parte de los emprendedores a la hora de formar sus equipos. Y cuando se habla de este tema, muchos piensan en aspectos como el género o la etnia, pero también hay que pensar en las personas mayores, aquellas que tienen una amplia experiencia que puede beneficiar, y mucho, a mejorar la idea de negocio que tienen entre manos.
Y es que incluir a las personas mayores en este equipo que está naciendo o que ya está en pleno desarrollo es vital para el funcionamiento de una startup. Las personas mayores tienen muchos beneficios si se compara con los jóvenes. Uno de ellos es la riqueza de experiencia y conocimientos acumulados a lo largo de sus carreras, lo que puede traducirse en mentoría valiosa para los empleados más jóvenes. Además, su perspectiva puede ayudar a evitar errores comunes y proporcionar una visión más equilibrada en la toma de decisiones estratégicas. Estudios han demostrado que la diversidad de edades en los equipos de trabajo puede mejorar la creatividad y la capacidad de resolución de problemas, factores cruciales en el entorno competitivo de las startups.
Para fomentar la inclusión de personas mayores, es fundamental que las startups adopten una cultura de respeto y apreciación hacia todas las edades. Esto puede empezar con la sensibilización del equipo sobre los beneficios de la diversidad etaria y la promoción de una mentalidad inclusiva. Los líderes de la startup deben ser los primeros en demostrar este compromiso, comunicando claramente que la inclusión de personas mayores no solo es aceptada, sino también valorada. Además, las políticas de contratación deben ser revisadas para eliminar cualquier sesgo inconsciente que pueda desincentivar la postulación de candidatos mayores.
Otro aspecto crucial es la adaptación del entorno laboral para hacerlo más accesible y cómodo para las personas mayores. Esto puede incluir ajustes ergonómicos en el lugar de trabajo, así como flexibilidad en los horarios para permitir un mejor equilibrio entre la vida laboral y personal. Las startups también pueden ofrecer programas de capacitación continua para ayudar a las personas mayores a mantenerse actualizadas con las últimas tecnologías y tendencias del sector. La capacitación no solo mejora las habilidades de los empleados mayores, sino que también demuestra el compromiso de la empresa con su desarrollo profesional.
Una preocupación común es cómo integrar a las personas mayores en un equipo predominantemente joven. La clave aquí es fomentar una cultura de colaboración y respeto mutuo. Las actividades de team building pueden ser diseñadas para incluir a todos los empleados, independientemente de su edad. Es fundamental crear oportunidades para que los empleados de diferentes generaciones interactúen y aprendan unos de otros. Esto puede ser facilitado a través de proyectos de trabajo colaborativo, mentorías inversas (donde los empleados más jóvenes enseñan a los mayores sobre nuevas tecnologías o tendencias) y actividades sociales.
La tecnología también juega un papel vital en la inclusión de personas mayores en startups. Las herramientas de comunicación y colaboración digital deben ser seleccionadas y configuradas teniendo en cuenta la accesibilidad para todos los empleados. Es esencial proporcionar la capacitación adecuada para asegurarse de que todos, independientemente de su edad, se sientan cómodos y competentes al utilizar estas herramientas. Además, las startups pueden considerar la implementación de tecnologías específicas diseñadas para mejorar la accesibilidad, como software de asistencia o interfaces de usuario simplificadas.
Un enfoque proactivo para fomentar la inclusión de personas mayores es desarrollar programas de mentoría. Las personas mayores pueden actuar como mentores para los empleados más jóvenes, compartiendo sus conocimientos y experiencia. Esta relación puede ser mutuamente beneficiosa, ya que los mentores también pueden aprender nuevas perspectivas y habilidades de sus colegas más jóvenes. Las mentorías cruzadas pueden fomentar una comprensión más profunda y un respeto mutuo entre generaciones, lo que a su vez puede mejorar la cohesión y la productividad del equipo.
La comunicación es otro pilar fundamental en la inclusión de personas mayores en startups. Es importante establecer canales de comunicación abiertos y efectivos donde todos los empleados se sientan escuchados y valorados. Las reuniones regulares, las encuestas de satisfacción y las sesiones de retroalimentación pueden ser herramientas útiles para monitorear el bienestar de los empleados mayores y hacer ajustes necesarios en las políticas y prácticas de la empresa.
Algunas startups han adoptado prácticas innovadoras para atraer y retener a personas mayores. Por ejemplo, la empresa de software SAP implementó un programa específico para reclutar y capacitar a trabajadores mayores, reconociendo el valor de su experiencia y conocimientos. Esta iniciativa no solo ha mejorado la diversidad etaria de la empresa, sino que también ha contribuido a un ambiente de trabajo más inclusivo y colaborativo. Otros ejemplos incluyen la creación de roles específicos que aprovechen la experiencia única de los empleados mayores, como consultores o asesores en proyectos estratégicos.
Precisamente este tema se ha tratado también en la gran pantalla, y ni más ni menos que de la mano de Robert De Niro, que protagoniza la película “El becario”, y en donde interpreta precisamente a una persona mayor que es contratada por una startup liderada por Anne Hathaway y en donde se muestran todos los beneficios que se pueden encontrar estas empresas emergentes si se contrata a gente más mayor y con más experiencia.
Las startups pueden utilizar una variedad de métricas para evaluar el impacto de sus esfuerzos. Estas pueden incluir la satisfacción y el compromiso de los empleados, la retención de personal, la diversidad de edades en los equipos de trabajo y el rendimiento general de la empresa. Es importante realizar un seguimiento regular de estos indicadores y estar dispuesto a hacer ajustes en las estrategias según sea necesario.
El desafío de fomentar la inclusión de personas mayores en startups no es insuperable. Requiere un enfoque consciente y deliberado, apoyado por políticas inclusivas y un compromiso genuino de toda la organización. Al adoptar estas estrategias, las startups no solo pueden beneficiarse de la vasta experiencia y conocimientos de los empleados mayores, sino que también pueden crear un entorno de trabajo más diverso, innovador y resiliente. La inclusión de personas mayores en startups es una inversión en el capital humano de la empresa, que puede ofrecer retornos significativos en términos de creatividad, productividad y satisfacción del equipo.
