Pablo Gimeno, presidente del grupo inversor PGS, este jueves en el debate de innovación in company de Cecabank en Madrid. | FOTOS: Alberto Orellana
El sector financiero hace tiempo que no es campo exclusivo de los bancos. No sólo eso, con la aparición de las fintechs, las entidades tradicionales comenzaron a enfrentarse a la verdadera disrupción tecnológica del mercado. Una revolución que, más allá de las tecnologías que lo posibilitan, ha generado un nuevo modelo que rentabiliza el dato. La innovación de los antiguos en este nuevo juego, que no saca beneficio de la parte financiera, necesita de las startups. Ambos actores tendrán que colaborar para resistir al incierto futuro del sector, mientras las grandes tecnológicas siguen impregnando industrias.
La necesidad de la "Innovación in Company" entre grandes y pequeños ha centrado el debate de este jueves organizado por Cecabank en Madrid. ¿Obligan las startups a las entidades más longevas a evolucionar más rápido? ¿Qué efecto han tenido en la innovación financiera regulaciones como la PSD2 o los avances en IA? Aunque no sabemos cómo serán los bancos dentro de diez años, la clave para su relevancia será "necesariamente" conversar con las fintechs, ha dicho el director de servicios de Cecabank, Javier Planelles.
Para Alda Rodríguez (regulación tecnológica en Accenture) se trata más de una "inspiración" que de una obligación por parte de las fintechs. En su opinión, las startups han sido "referentes"; han marcado el camino hacia el modelo colaborativo. Un sistema que ha servido de "acicate" para los bancos, especialmente desde la entrada de las "Big Tech" en el modelo financiero, ha señalado Luis Olmedo. Ese fue el "punto de inflexión" en el que las startups han empezado a ayudar a la banca a optimizar sus procesos para sacar valor de la parte no financiera de su servicio, según el experto en fintech de KPGM.
Las nuevas empresas han apostado por el trabajo conjunto y la innovación abierta para hacer frente a los retos presentes y futuros. Una colaboración que fusiona la rapidez de aquellas, con el ecosistema, regulación y bolsa de clientes de las entidades tradicionales. Será necesario para abordar temas como la ciberseguridad, un desafío del que no se salva "ni Bizum", ha declarado Ramón Ferraz, CEO de 2gether. Con la evolución de la IA y regulaciones como la PSD2, ambos darán lugar a los casos de uso del petróleo del dato.
Información tanto para dar servicios al cliente, como para prevenir posibles financiaciones terroristas (con procesado de lenguaje natural, por ejemplo). Todo a través de APIs (softwares de aplicaciones) desarrolladas por fintechs en comunión con las grandes firmas. La PSD2, que ha obligado a los bancos a ceder a terceros información de las cuentas de pagos de sus clientes , ha sido un gran apoyo en ese sentido. Así lo entiende Rodríguez, quien habla de la primera normativa que "no restrictiva" en el sector, y que "parece diseñada por ingenieros".
Los datos financieros que posibilitan las nuevas tecnologías son "muy ricos", pues "representan" a cada cliente: todas sus cuentas y transacciones, ha argumentado Ferraz. Ese es el potencial que bancos y startups tienen que aprovechar para estar entre los que resistan a las embestidas de las "Big Tech". Y que están cambiando qué sirve de moneda. "Vamos a manejar euros y otros activos digitales; las criptomonedas son sólo el primer caso", ha abundado el de la plataforma de banco colaborativo 2gether.
La "Libra" de Facebook, es un ejemplo de la siguiente sacudida. "¿Quién va a parar esto?" se ha preguntado la de Accenture. Si no se hace, "el año que viene" los clientes podrían estar reclamando esta criptodivisa en su banco tradicional, ha aventurado Ferraz. Las "Big4" "son una amenaza", ha admitido Rodríguez, pero para la economía mundial y la política monetaria de los bancos centrales, no sólo para los bancos. "No es moco de pavo". Afortunadamente las entidades bancarias cuentan con la ventaja de seguir siendo depositarios de la seguridad de sus clientes. Los clientes "siguen confiando" sus datos.
La colaboración entre fintechs y bancos está demostrada y es "indiscutible", ha apuntado. Su convivencia es "absolutamente necesaria", ha comentado Julio Melero, director de datos e innovación de Cecabank. Sólo así podrán aportar cada uno su rasgo diferencial a la cadena de valor. No sabemos cómo serán las necesidades financieras de dentro de diez años, "pero sí que habrá que ir acompañados", ha desgranado Melero.