Hace pocos días hemos decidido cerrar un negocio en el qué era socio. La verdad es que tomar ésta decisión no es ni mucho menos fácil, os lo aseguro. Ahora bien, tomar la decisión de cerrar a tiempo nos puede suponer evitar un montón de problemas tanto a nivel personal como a nivel económico.
Por éste motivo os indico algunas señales a las que os aconsejo poner atención para diagnosticar a tiempo si vuestro negocio se encuentra precisamente en éste momento.
1. El mercado:
Vivimos en un mundo cambiante. Por ello es importante que nos preguntemos si aún existe un mercado para nuestros productos o servicios. A menudo, en nuestro plan de negocio asumimos una realidad y unas perspectivas sobre el mercado que puede ser que no se estén cumpliendo. Tenemos que ser capaces de analizarlo y valorar si aún existe un sitio para nuestro negocio.
2. Nuestro grado de endeudamiento:
Cuanto representa nuestra deuda sobre nuestros activos? Empezar un nuevo negocio nos supondrá en muchos casos tener que pedir dinero prestado para financiar parte de nuestros activos. Debemos de estar atentos a si las deudas que tenemos en relación a nuestros activos es cada vez mayor. Yo acostumbro a considerar una mala señal si esta relación está por encima del 60%.
3. Perdidas:
Estamos perdiendo dinero y nuestras pérdidas van en aumento? Por supuesto que podemos tener pérdidas y que nuestro negocio sea saludable. Debemos ser capaces de detectar si vamos a ser capaces de remontar nuestras deudas, y si se ajustan a nuestro modelo de negocio y a lo esperado en otras empresas de nuestro sector.
4. Capacidad de financiación:
¿Habéis hablado últimamente con vuestro banco? ¿Os ampliaría vuestra póliza de crédito? ¿Os daría un préstamo? Una buena señal es saber cómo ve nuestros balances y cuentas nuestra entidad de confianza, o incluso como los vería un nuevo inversor. Nos proporcionará una buena señal de la salud de nuestro negocio.
5. Rotación de inventario:
Ésta señal suele ser muy útil en negocios basados en la venta de productos. Si nos ha disminuido la rotación de los productos, o permanecen en nuestro punto de venta o almacén más de lo normal, debemos valorarlo como una no muy buena señal.
Y en último lugar, pero no por eso menos importante: ¿cuál es vuestra relación con el negocio?. ¿tenéis aún motivación?. ¿disfrutáis? Si sois emprendedores o ya un poco más veteranos es importante que vuestro negocio os aporte alegría y os llene. Si supone un lastre la mayoría de los días, prestad atención a ello. Quizás es momento de tomar una decisión.