Comenzar en el mundo de las Startups requiere además de paciencia, conocimientos de diferentes ámbitos y temáticas, más allá de los que están relacionados con nuestro propio negocio. Finanzas, comunicación, recursos humanos o marketing son algunas de las ramas que tenemos que manejar a la hora de poner en marcha nuestro proyecto.
Mi pasión siempre ha sido la rama del marketing y el desarrollo estratégico. Desde el año 2007 me he dedicado a hacer investigaciones de mercado y ha sido aquí precisamente, donde me he dado cuenta de que un negocio a día de hoy, se sustenta en varios pilares.
Me centraré en 2:
1. Mantenerse cerca de la competencia
Además de tener una buena idea de negocio, un proyecto tiene que saber situarse en el mercado y la mejor manera para hacerlo es conociendo qué ha existido, qué hay y qué puede llegar a nuestro sector. En ocasiones nos centramos en conocer a la competencia únicamente al inicio de nuestro proyecto cuando hacemos un plan de empresa, pero no caemos en la cuenta de que el mercado es un mundo tan dinámico que si nos despistamos posiblemente mañana ya sea demasiado tarde para reaccionar. Camarón que se duerme, la corriente se lo lleva. No sólo basta con conocer a nuestros competidores, cuánto venden ni a quién. Hay que estar cerca de ellos, saber qué hacen, así podremos descubrir carencias, estrategias que no se llevan a cabo, etc. Y en ocasiones hasta complementarnos.
Una de las herramientas que fácilmente nos permite seguir el rastro de la competencia es Google Alerts. Con ella, estableciendo unos términos de búsqueda relacionados con nuestro negocio, podemos estar al día de noticias y contenidos que aparecen en la red y que pueden facilitarnos conocer qué se cuece en nuestro sector.
2. Conocer a nuestros usuarios
Más allá de conocer nuestro propio producto o servicio, hay que conocer a nuestros consumidores, qué necesitan, cómo se comportan, a qué productos sustitutivos acuden, etc. Al fin y al cabo, son el punto fuerte de nuestro negocio.
Existen multitud de herramientas de analítica web. Y aunque muchas empresas se decantan por los servicios externos y herramientas de pago, existen algunas gratuitas de las que no tenemos que temer por nuestra privacidad, falta de servicio técnico o que vayan a desaparecer en un futuro. Sin duda, una de éstas es Google Analytics. Permite conocer más allá del número de visitas que recibimos o el tiempo medio de estancia en la página. Podemos saber de dónde proceden nuestras visitas, qué páginas son las más consultadas y en cuáles los usuarios abandonan nuestra web.
¿Cuántas veces hemos entrado en una página buscando algo concreto y hemos salido sin encontrarlo? Con Analytics podemos saber qué páginas son las “páginas de salida” de los usuarios y con esto podemos descubrir si encuentran lo que buscan. Tal vez estemos dando esperanza de localizar un producto o servicio concreto y no lo encuentra el usuario o el diseño de la página no permite localizarlo con facilidad.
Estos datos son una buena base para construir estrategias eficaces y redireccionar, si es necesario, nuestros objetivos, además de detectar problemas para poder reaccionar a tiempo.
Si queréis conocer más sobre el mundo de la analítica y la investigación, estaré encantada de colaborar con vosotros.