El mercado de las aplicaciones software a las que se accede a través de un navegador en Internet está creciendo de forma rápida y no es difícil imaginarse el por qué de su popularidad.
Cada día son más las aplicaciones disponibles bajo la fórmula de pago por uso e incluso gratuitas, y las pequeñas y medianas empresas tienen ahora más fácil que nunca encontrar una solución que responda a sus necesidades y se adapte a sus presupuestos.
Las PYME tienen la oportunidad hoy de aprovechar los recursos hardware que les ofrecen las empresas proveedoras, haciendo uso tanto de la capacidad de sus servidores como de las medidas de seguridad instaladas, evitándose así la necesidad de tener que adquirir el software para luego instalarlo en servidores propios.
Los principales analistas del mercado como Gartner o Forrester han pronosticado que en los próximos años más y más aplicaciones se irán incorporando a esta modalidad de software. Además estiman un crecimiento del 25% en los próximos 3 años y que el mercado mundial del software como servicio (software-as-a-service, o SaaS) se expanda hasta los 19 mil millones de euros.
Este crecimiento dará lugar a que el tipo de herramientas y aplicaciones ofrecidas como servicio vaya en aumento y abarque áreas como el software de oficina, el e-mail, las ventas, el marketing, los ERP, el comercio electrónico, el aprovisionamiento y muchos más. Dentro de esta tendencia el CRM está siendo uno de los claros protagonistas de la revolución SaaS y será, según pronostican todos los analistas, uno de los servicios más demandados por las PYME y con mayor crecimiento en los próximos años.
Un reflejo de toda esta tendencia la podemos observar en las compañías tecnológicas más grandes del mercado, como Microsoft y Oracle, que llevan tiempo migrando sus aplicaciones más conocidas al nuevo entorno en la nube y ofrecen ya servicios gratuitos para captar clientes en un mercado que empieza a estar muy competido.
Otras empresas como Google han apostado fuertemente por el desarrollo de aplicaciones como servicio y lidera una agresiva campaña para ofrecer su ecosistema de aplicaciones Google Apps, de forma gratuita en una versión básica, o en la modalidad de pago para versiones y funcionalidades más avanzadas.
Y es que en el futuro del SaaS el precio es un factor clave. En la mayoría de las aplicaciones ofrecidas como servicio en el mercado las tarifas oscilan normalmente desde los 5-10 euros mensuales hasta los 200, dependiendo de la complejidad del servicio o la cantidad de funcionalidades que se demanden. Estas tarifas incluyen normalmente las actualizaciones del servicio, el mantenimiento y, en algunos casos, el soporte de usuarios. También existen costes adicionales relacionados con la capacidad de almacenamiento, el número de usuarios o el soporte extendido a los usuarios.
Sin duda la gran beneficiada de todos estos desarrollos y tendencias es la PYME, que tendrá acceso a un sin fin de nuevas capacidades hasta ahora sólo disponibles para las grandes empresas y que de otro modo hubieran sido muy costosas de adquirir e instalar en las propias instalaciones.