Ser madre tiene mucho de emrpendedora y ser emprendedora tiene mucho de madre.
Cuando decides ser madre, tienes los mismos miedos e incertidumbres que cuando decides crear tu propia empresa, pero también partes con la misma ilusión, con las mismas ganas, con la misma energía.
Cuando eres madre te puedes encontrar con alguien que te dice: " Pero ya te los has pensado?", y no te digo nada cuando eres emprendedora y más en medio de una crisis: " ¿ pero sabes lo que haces?"
Cuando eres madre, sobretodo si ya tienes otro hijo, te dirán: Vaya, tu 2º hijo, verás con los celos, pobre principe destronado, que mal lo va a pasar. Y si eres emprendedora puedes escuchar: con lo mal que están las cosas, cómo se te ocurre, y además, ¿que experiencia tienes tu en esto?
Pero nada de esto importa. Lo importante es tu hijo. Lo importante es tu empresa. No dejes que nadie te robe tu energía, tu fuerza para sacar tus proyectos adelante, sea el proyecto que sea. Cree en tu decisión y hacia delante.
Por suerte, cuando eres madre también te encuentras con personas, generalmente otras madres que ya han pasado por lo mismo que te dan ideas, sugerencias, te pasan algún libro y te dan alguna recomendación sobre algún pediatra y hasta de pasa algo de ropa. Cuando eres emprendedora, también te encuentras con este tipo de gente, que generalemente también han creado su propio negocio , y te cuenta su experiencia, te muestran todo su apoyo, te dan consejos, te recomiendan algún buen libro.
Aprovecha los buenos consejos, escucha a las personas que te apoyan. Y a las que no te apoyan también, porque estás te pueden hacer ver la dificultades a las que te puedes enfrentar y así podrás buscar una solución antes de que se produzcan: que te hablan del problema ed los celos: lee algún libro que hable sobre la llegada del nuevo hermano. Que te hablan de la crisis: busca a esos emprendedores que apesar de la crisis se han hecho un hueco en el mercado.
Pero si tomas una decisión sigue hacia delante, consigue tu objetivo, que los consejos de las personas te abran puertas, pero que nunca te las cierren. Problemas vas a encontrar, soluciones también.
