Incluso a sus propios colaboradores sorprendió la noticia de la retirada de la primera línea de la política de Esperanza Arguirre.
Una dimisión que no ha dejado indiferente a nadie, ni a compañeros de partido, ni a oposición. La Marca Personal de la ya expresidenta de la Comunidad de Madrid es la responsable de este anuncio no haya pasado desapercibido ante nadie. Sin duda fue la bomba informativa del día.
Estamos acostumbrados a hablar de las marcas, del branding, en las empresas. Cómo debe comunicar o no, cómo usarla correctamente, pero el Personal Branding, la Marca Personal es aún más importante que la de la empresa.
A día de hoy ya no es tan frecuente que una persona desarrolle toda su carrera profesional en la misma compañía. Las marcas de empresa llegan a nuestra vida profesional y se van, normalmente, para dejar paso a otra. Pero la Personal nos acompaña toda la vida. Es la huella que dejamos en los demás, independientemente de cual sea nuestra función.
Sin embargo, si en lugar de hablar de un profesional por cuenta ajena, hablamos de un emprendedor, entonces cobra aún más importancia.
Cuando arrancamos una idea, que hacemos viable a través de un modelo de negocio, la marca de la empresa no es conocida, en la mayoría de los casos no está ni pensada aún. Lo que sí existe es la Marca Personal del emprendedor. Cuanto más fuerte sea esta, más va a ayudar a lanzar la de la recién creada empresa. La Marca Personal juega un papel esencial en el lanzamiento de un nuevo negocio.
Nadie va a invertir en el proyecto ni a comprar tus productos o servicios por la nueva marca, eso será más adelante. Atraerás inversores y a tus primeros clientes por la confianza que tú y tu equipo inspiréis en ellos. Si tu marca personal te avala, si inspiras confianza, estás avalando con ella a la empresa aún desconocida.
Habitualmente los emprendedores se preocupan del producto, de cómo van a venderlo y de crear una marca. Y eso no solo está muy bien, sino que es absolutamente imprescindible para que el proyecto arranque y sea viable. Pero, no pierdas de vista a tu marca personal, pues ella es el mejor aval. En los primeros momentos de vida de un proyecto el promotor es mucho más importante que la propia idea. Y lo que se conoce del promotor, lo que otros piensan de él, de su capacidad, de su constancia, de sus conocimientos del sector, forma parte de su Marca Personal.
El personal branding es fundamental en un mercado laboral con poca oferta y mucha demanda. Pero si además hablamos de emprender, una buena marca personal va a ayudar muchísimo en los momentos más difíciles, los iniciales.