Se acerca el 19 de marzo, día de San José. Un día muy especial para todos aquellos padres, que ven durante ese día un pequeño extra de cariño o reconocimiento por parte de sus hijos y familia. Y es que, nunca ha sido fácil, y cada generación ha tenido sus propias circunstancias que han hecho la tarea de ser padre, una aventura.
Y quizás muchos de los que celebren este día con sus pequeños, en la actualidad hayan tenido que emprender su propio negocio, o carrera empresarial, dada la coyuntura económica general o simplemente poniendo en marcha sus sueños, o materializando esa idea que les rondaba hacía tiempo por la cabeza.
Muchos de ellos jóvenes o de mediana edad que en su vida personal, esa que es tan difícil no mezclar con la laboral, tienen la gran suerte de tener hijos a su alrededor. Esos hijos que son capaces de alegrarte y poner una sonrisa al peor de los días; esos que motivan, que te conocen, te consuelan y sin querer te cuidan para que cada mañana tengas fuerzas de seguir peleando por tus sueños, y por los suyos.
Pero no hay que olvidar los esfuerzos y sacrificios que emprender de por sí conlleva, y que suelen tener en el tiempo que pasas con la familia, uno de los grandes damnificados. Por eso, con todas las consideraciones hacia aquellos que trabajan mucho para otros o son intraemprendedores, me gustaría hacer una mención especial a los emprendedores que el día del padre, y otros muchos, no podrán pasar todo el tiempo que les gustaría con su familia.
A ellos les diría que normalmente las cosas que obtenemos en la vida no llegan como un regalo... llega como recompensa al esfuerzo por alcanzarla. Y también compartiría unas reflexiones que surgieron la pasada semana a la hora de compartir con jóvenes de 14 y 15 años, lo que había supuesto para mí, mi propia experiencia emprendedora; y es que, no sé si el emprendedor nace o se hace.
Lo que sí se, es que en la vida, la educación o los valores que aprendemos en edades tempranas pueden ayudar mucho en la actitud con la que se afronten los problemas que siempre surgen en este apasionante camino que es la vida. Así con todo ello, otra de las partes positivas a la hora de emprender es que, podemos compartir las vivencias con los más jóvenes y así inculcarles nuestra parte de responsabilidad y autonomía en la vida.
Feliz día del padre.