“Además de a un nuevo orden mundial, nos enfrentamos a un nuevo marco político, económico y estratégico” y, en este sentido, el plan de recuperación para Europa “tiene muy marcado que la transición ecológica y la transformación digital deben ir de la mano”, afirma Ana Landeta, directora de la Relaciones Institucionales del Grupo Educativo CEF.- UDIMA y vicepresidenta de TodoStartups.
Así se manifestó en su intervención en las I Jornadas OKGreen de OKDiario, en la Mesa Redonda ‘El compromiso de las empresas con la sostenibilidad. El reto corporativo’, que moderó el periodista Vicente Gil y que contó también con la participación de Miguel Ángel Fernández, CMO de LG España, y Dolores Huerta, directora general de GBCe (y que puede visionarse en este enlace desde el minutaje 2 horas y 32 minutos).
Saludó Ana Landeta que, a día de hoy, las empresas, y en particular las pymes, “que son el gran tejido productivo de nuestra economía”, ya son “muy conscientes de que hay que digitalizar servicios, productos y procesos, e ir de la mano de esa transición ecológica para trabajar este nuevo marco”.
Y al respecto, subrayó que “la gestión del cambio en cualquier empresa la protagonizan las personas, el capital humano”, lo que, a su juicio, se debe tener muy en cuenta a la hora de elaborar planes en esta línea. Sin la colaboración de las personas, cualquier plan puede quedar en papel mojado, vino a decir.
Admitió que la pandemia ha supuesto un mazazo a la economía en su conjunto, pero destacó, sin embargo, que a la pyme le ha supuesto “un acelerador de la transformación digital”. “¿Qué ocurre ahora mismo?”, se preguntó, “pues que todos esos planes estratégicos empresariales están intentando canalizar, por un lado, su plan de transformación digital y, por otro, decidir una política de RSC que les permita ir permeando poco a poco todos esos cambios de índole legislativo”.
Todo ello procurando favorecer que los costes se minimicen paulatinamente y, al mismo tiempo, “puedan optar a esa nueva financiación para poder regenerar en definitiva su modelo de negocio”. “Porque”, recordó, “en este momento vivimos la cuarta revolución industrial y los modelos de negocio deben ser digitales y sostenibles”.
En este camino, a modo de crítica constructiva, echó en falta una mejor comunicación institucional que ponga en valor, por ejemplo, la Agenda 2030 o los contenidos y posibilidades del plan de recuperación.
“Un buen ejemplo de la mala praxis es la campaña de comunicación. Por ejemplo, los Objetivos de Desarrollo Sostenible o el nuevo plan de vivienda, en definitiva, las políticas palanca del plan de recuperación español: Eso no se está explicando y no permea en la ciudadanía”. Manifestó su convencimiento de que hay “una cierta desconexión entre la política y lo que realmente luego llega al ciudadano, porque realmente se están haciendo cosas muy interesantes en clave europea y en clave país” que no alcanzan a todos.
Ahora bien, matizó, “es muy importante que cuidemos el planeta, pero en unos términos razonables”. Ana Landeta sostuvo que “no le podemos pedir al ciudadano de a pie que conozca qué es la Agenda 2030, pero sí que podríamos realizar una labor de mayor difusión, y buen ejemplo de ello es la página web de La Moncloa cuando anuncia el plan de recuperación ¿eso quién lo entiende?”, lamentó
Ocurre lo propio con las pymes, de las que tanto parece esperarse: “No podemos echarle al hombro a todas las pymes españolas su definición de la noche a la mañana, ni victimizar a la ciudadanía porque no sepa en qué términos tiene que reciclar su basura diaria y, aunque se está haciendo un gran esfuerzo para acelerar ese efecto llegada de todas estas novedades, es cierto que carecemos de una buena comunicación externa”.
Por último, significó que la administración pública también está en plena transformación y aplaudió los esfuerzos que en este sentido están realizado ministerios clave como el de Industria o el de Economía “por acelerar todos estos cambios, no solo en lo tocante a la financiación, sino de mentalidad, de forma de hacer las cosas, que nos aproximen más a modelos de vida mucho sostenibles, pero siempre desde un ángulo de serenidad”.