Por Redacción - Mar 22, 2021
María Gilabert y Víctor Giné tratan de “humanizar” al emprendedor que hay detrás de cada startup. Para ello han unido sus fuerzas de apoyo al empresario. Giné es CEO del club inversor Oryon Universal, que ofrece un acompañamiento estratégico y empresarial. Gilabert, fundadora de BeValue, se centra en esa gestión emocional y psicológica.
Crear y hacer crecer una startup requiere de varias competencias que el equipo inicial, generalmente reducido, tiene que asumir antes o después. Roles financieros, estratégicos, legales, de marketing… conocimientos que el emprendedor tiene que valorar y sobre los que es importante formarse.
Sin embargo, hay otras habilidades que también hay que atender, y a las que no se les otorga tanta relevancia, cuando en realidad están presentes en cada uno de esos roles. “La seguridad, el liderazgo, la gestión emocional, la comunicación asertiva, la negociación, la capacidad de adaptación a los cambios o la orientación a la resolución de problemas, son competencias “esenciales”.
Así las define Gilabert, licenciada en Psicología y Publicidad y Relaciones Públicas, y fundadora y directora de BeValue. Su empresa emplea las últimas técnicas de neurociencia y coaching para desarrollar la fortaleza emocional y psicológica de los emprendedores. Por su parte, Giné dirige la corporación que apuesta por la co-creación y el apoyo estratégico entre inversores y emprendedores en sus CARE (Centros de Alto Rendimiento).
Conversa con María Gilabert y Víctor Giné el periodista de TodoStartups, Alberto Orellana.