La crisis provocada por la pandemia del coronavirus está golpeando con dureza nuestra economía. Muchas empresas tiñen de rojo su 2020 y, como consecuencia de ello, los empleados ven peligrar sus puestos de trabajo. En el momento de escribir estas líneas, los trabajadores afectados por un expediente regulación temporal de empleo ascendía a casi un millón de personas.
Con este panorama, es importante reflexionar acerca del papel fundamental que la comunicación y sus profesionales van a tener para mantener la moral de una tropa que viene desgastada después de una mala noticia tras otra. Si bien es cierto que, en el momento actual, las empresas están poniendo el foco en los aspectos técnicos y formales para justificar la presentación de sus expedientes de regulación de empleo, también es cierto que deben velar por el impacto que estos expedientes van a causar en los afectados y sus equipos.
De un tiempo a esta parte, se han vertido ríos de tinta poniendo en valor el papel que juegan las personas en las organizaciones, nos hemos hartado de hablar de términos como el employee-centrism y hemos diseñado estrategias para que el trabajo ya no consistiera, solamente, en ir a trabajar. Hemos diseñado planes de employee experience para impactar en nuestro employer branding y, por supuesto, todo basado en un análisis interno de la organización y la employee value proposition. Palabras.
Ahora es momento de centrarnos en los hechos. Ahora es momento de apostar por el camino trazado. Si no queremos que todo lo que hemos construido se derrumbe como un castillo de naipes, debemos apostar claramente por las personas y por su futuro en las organizaciones.
Nadie pone en duda que, en momentos como el actual, las empresas tengan que acogerse a las medidas de carácter excepcional que el gobierno ha puesto a su alcance para minimizar los efectos devastadores provocados por el COVID-19, pero también ahora es el momento de sobresalir por encima del resto en el acompañamiento a los profesionales afectados por esta situación.
Por este motivo, decimos alto y claro que... ¡es tiempo de managers! Los profesionales con personas a su cargo deben demostrar el motivo por el cual sus empresas han depositado la confianza de la gestión de personas en ellos. Con la mirada puesta en el futuro, el papel de estos responsables de equipos será de vital importancia para mantener los niveles de compromiso y adhesión al proyecto de la organización. A nadie se le escapa que una situación de estas características, por más justificada que esté, es un torpedo en la línea de flotación de la relación entre profesionales y empresa.
En este momento en el que están muchas cosas en juego, las empresas no pueden permitirse el lujo de desconectar con las personas que forman parte de sus organizaciones. Es un momento que, gestionado de manera eficiente, puede suponer una gran oportunidad para la cultura empresarial. Por este motivo, más que nunca, queremos compartir contigo que estás leyendo estas líneas, un decálogo para que, como manager, seas capaz de gestionar, de manera correcta, la comunicación con tus Equipos:
Los empleados afectados por un ERTE siguen formando parte de la organización. A pesar de que su relación laboral está suspendida, su vinculación con el proyecto debe mantenerse intacta. Por este motivo, la primera comunicación con el afectado debe ir en esta dirección.
Adquiere el compromiso de mantener informados a todos los miembros de tu equipo durante este periodo. Es muy importante mantenerte cerca de las personas para mantenerles “enchufados” y con la mirada puesta en el futuro.
La comunicación que lleves a cabo con los miembros de tu equipo debe producirse de manera proactiva. No esperes a recibir la llamada inquieta de alguien que está en situación de ERTE.
Comunica de manera coherente y transparente. Recuerda que la información debe estar alineada con los objetivos de la organización. Y todos los managers deben estar alineados en el mensaje a trasladar.
Haz partícipe a tu equipo de las evoluciones que esté experimentando la situación de crisis y, por ende, como está afectando a tu compañía.
Sé constante en la comunicación con tu Equipo. Acompáñales durante el proceso intentando adaptar, en la medida de lo posible, la frecuencia en las comunicaciones al perfil de cada empleado.
Prepara las conversaciones. Tú eres el canal de comunicación más importante en estos momentos y tu interlocutor debe sentirse acompañado en el proceso de comunicación
Muéstrate disponible ante cualquier pregunta que te puedan trasladar. Empatiza. Tú no eres especialista en ERTEs pero eres una persona de referencia para la persona afectada.
Responde a sus preguntas de manera clara y concisa.
Si no tienes la información en el preciso momento en el que te trasladan la consulta, no pasa nada. Búscala y tan pronto como la encuentres, compártela con la persona que te ha trasladado la cuestión. Ahora más que nunca, los managers se tienen que apoyar en el Área de Personas para poder liderar este proceso con garantías.
No es agradable vivir una situación de crisis como la que estamos viviendo. El contexto actual es complicado y todavía no sabemos, a ciencia cierta, el impacto que puede ocasionar en la economía del país y de nuestras organizaciones. Pero también es cierto que se trata de una oportunidad para repensar nuestra organización, buscar nuevas eficiencias y, sobre todo, enfocarnos hacia nuestro cliente interno para superar esta situación juntos.
#todosaldrábien si permanecemos unidos y con el foco puesto en nuestro cliente interno.