Por Redacción - Sep 26, 2018
Al poner en marcha una idea de negocio, los emprendedores tienen que tomar muchas decisiones, desde el nombre de la compañía en cuestión, hasta la fórmula de financiación que mejor se adapte a las necesidades. Pero también hay otras cosas que hay que considerar previamente, como el logo, el lema de la empresa, que serán la imagen de la compañía que le acompañará para siempre, y también la oficina en la que se instalarán, la maquinaria que utilizarán y hasta los servicios que se contratarán.
Todas estas decisiones formarán parte de la imagen de marca, de lo que el emprendedor querrá transmitir a sus clientes y proveedores, por eso hay que pensarlo muy bien para así proceder de la mejor manera. Hay que pensar en el logo, en los colores y también, por qué no, en el packaging, que al fin y al cabo será parte de la estrategia de marca.
Y es que es la identidad de la compañía, lo que recibirá el cliente al recibir su producto o su carta con la factura o la notificación correspondiente. Por eso hay que elegir correctamente la empresa de ecommerce que trabaje en los embalajes para negocios, como Embaleo, donde se pueden comprar sobres acolchados con la imagen de la marca, sobres y cajas de todo tipo, que se adapten a cada necesidad.
Pensar en el packaging parece un poco superficial, pero supone una buena tarjeta de visita, ya que se puede incluso utilizar para incorporar información sobre la compañía, sus buenas prácticas utilizando, por ejemplo, material reciclado, o simplemente los números de contacto o los mails para que los clientes puedan remitir sus dudas y preguntas.
Pero también tiene su funcionalidad, ya que previene que el producto que se envía esté protegido durante su transporte y envío, de ahí la importancia de elegir un material que se adapte a las necesidades y que puede ir desde cajas de cartón baratas, hasta plástico reciclado o sobres acolchados.
Es precisamente en la venta online donde el packaging adquiere mayor importancia, ya que el cliente recibe el producto en su casa sin haber contactado físicamente con la compañía con anterioridad. Así que elegir el packaging y su diseño es vital para que el cliente tenga una buena impresión desde el minuto uno que recibe el producto.
Para poder causar una buena impresión al cliente, hay que pensar en esta estrategia de imagen, teniendo en consideración todo lo antes mencionado, desde los colores, el logo, el lema de la compañía y la información que se quiera dar al entregar el producto. Y es que, como bien se sabe, una imagen vale más que mil palabras, y una buena impresión al recibir algo en casa, hace un mundo para obtener una mejor valoración online.