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Emprendedores forzados

Fact or Fake concept, Hand flip wood cube change the word, April fools day

La emprendiduría es sin lugar a dudas otra burbuja, el entusiasmo con que se inician los proyectos de nuevas empresas a menudo se ve abocado hacia un final de cierre, muchas veces por fallos elementales en la dinámica de proyectos de startup o lanzamientos de nuevas ideas de empresa.

Hace no mucho me comentaba un conocido que trabaja en los servicios del Inem, que tenía que poner freno al aluvión de personas, que, desesperadas, venían a su puesto a pedir ayuda para gastar toda su prestación de desempleo en ideas, algunas veces estrambóticas, que no tenían muchos visos de triunfar, y de las que tenían muy poca idea sobre cómo llevarlas a cabo. Todo esto guiados por el frenesí emprendedor que las instituciones se han encargado de fomentar para camuflar las terroríficas cifras de destrucción de empleo desde la crisis de 2008.

Lo cierto es que desde la configuración de una idea de negocio brillante hasta su ajuste a la realidad del mercado y posterior comercialización exitosa, hay un largo y espinoso camino.

También es cierto que muchas de las ideas de negocio brillantes no triunfan por falta de financiación, por lo que saber comunicar con los inversores potenciales es un arte que también hay que desarrollar. Para esta fase son de gran ayuda los principios de Project finance que provienen del entorno de la Gestión de proyectos, con la particularidad de que éstos se centran en grandes infraestructuras y muchos de los proyectos de startup son 100% digitales.

Para la parte conceptual ayudan técnicas de mejora continua aplicadas al desarrollo de la innovación como Lean, Six sigma, Canvas business model, Design thinking, etc, que generan multitud de nuevas perspectivas para la definición y diseño del producto desde el conocimiento del mercado y del cliente como persona real en el entorno de su vida cotidiana.

Así como para el desarrollo y validación de los modelos de negocio que lleven a conseguir hacer realidad las ideas concebidas en la primera fase de conceptuación.

El trato y las relaciones con los stakeholders, fundamentalmente inversores, influenciadores y early adopters, también es fundamental, a la hora de saber definir y transmitir las ventajas del proyecto, así como entusiasmar a los inversores en las rondas de financiación de la start-up. Pero no solo en un estadio posterior, también el análisis debe realizarse desde el prisma de las necesidades, deseos o inquietudes del cliente final, que en cada caso será un grupo más o menos determinado de personas. De ahí la importancia de la aproximación humana a la estrategia corporativa.

Para ir concluyendo, las relaciones mercantiles entre los socios del proyecto de startup también son fundamentales, y para ello hay que articular mecanismos contractuales que, colmando las pretensiones de todas las partes, y estableciendo mecanismos de entrada y salida que respeten los derechos de cada parte, sepan preservar el criterio de unidad de proyecto de modo que se garantice la continuidad a pesar de que se materialice alguno de los riesgos que se ciernen sobre el éxito de la startup.

Además, la gestión de riesgos es una disciplina de vital conocimiento, ya que prever con el máximo grado de acierto, las posibles barreras o inconveniencias que pueden dar en el proyecto, así como el protocolo de respuestas ante cambios obligados en el proyecto (gestión de cambios) es vital a la hora de garantizar el éxito, pudiendo usarse los estándares habituales o recurrirse al específico para Project risk management para la gestión de riesgos en los proyectos del PMBoK.

Con la finalidad de unificar todos estos conocimientos para quienes dirigen proyectos de startup o simplemente personas que quieren adentrarse en una oportunidad laboral en alza, el Centro de estudios Financieros (CEF.-) ha preparado el Curso Monográfico Práctico sobre Creación de Startups.

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