Por Redacción - Mayo 17, 2018
Cuando un emprendedor empieza su andadura en el mundo de los negocios, muchos de ellos dedican parte de su vida y de su casa a desarrollar esa idea. Trabajar desde casa es el día a día, pero a veces necesitan de espacios para reuniones con clientes, proveedores o simplemente con miembros de su equipo.
Y es que cuando se organiza un evento de empresa, la tarea no suele ser fácil. Hay que contactar con los invitados, con los trabajadores, con los clientes y con los visitantes, acordar una fechas y decidir cuál será el lugar elegido para dar una imagen de profesionalidad.
Por ello, hay que establecer una serie de puntos y prioridades para que todo llegue a buen término.
Elección del lugar
El ahorro es el buque insignia de cualquier emprendedor y por eso muchos optan por alquilar espacios durante un periodo determinado de tiempo que se adaptan a una necesidad específica y consiguen dar una visión de profesionalidad a los clientes.
Pues bien, Sala-mandra es una opción a considerar, ya que se trata de una web en la que se pueden alquilar espacios para eventos por días, horas semanas... Entre su oferta de espacios para eventos podemos encontrar salas de reuniones, terapia, exposiciones o para desarrollar actividades privadas.
Este portal permite a los emprendedores alquilar espacios de manera efímera y se caracteriza por su amplia variedad de oferta, entre las que se incluyen salas destinadas a las actuaciones y ensayos, como pueden ser las salas de concierto, teatro o danza; salas de salud y bienestar, destinadas a actividades relacionadas con la terapia, yoga o cursos de retiro; de exposiciones y presentaciones, que son locales como naves industriales o showrooms para eventos particulares.
También ofrece salas para celebraciones y fiestas y para trabajo y conferencias, ideales para sesiones de coworking, formación, despachos o talleres, entre otras cosas.
Para localizar la sala perfecta para tu evento, simplemente tendrás que indicar tus preferencias a través de su buscador avanzado y, automáticamente obtendrás una gran variedad de salas para celebrar tu evento.
Planificación previa y presupuesto
La planificación es la clave del éxito. Hay que ser previsor y organizar todos los detalles con tiempo, ajustándose al presupuesto disponible y a los objetivos a alcanzar. Así que teniendo claro cuáles son los objetivos del evento en cuestión, evalúa la situación actual de la empresa y actúa en consecuencia. Decide si se trata de un evento lúdico para reforzar el espíritu de trabajo en equipo entre los compañeros o simplemente es un evento destinado a la formación. Y actúa en consecuencia, teniendo, por supuesto, muy claro el presupuesto del que se dispone. Ya se sabe que el ahorro es muy importante para los emprendedores, así que planifica en función a ella.
Temática
Los eventos de empresa suelen ser un poco aburridos, así que para ser originales se puede optar por elegir una temática definida para que todo el evento en cuestión quede cohesionado. Y también puede ayudar a los organizadores a la hora de definir los materiales y el presupuesto del que se dispone, además de las actividades a realizar.
Por supuesto, catering
Los eventos de empresa suelen dar lugar a muchas horas de trabajo y de esfuerzo por parte de los trabajadores, de ahí que los participantes se merezcan un descanso entre actividad y actividad. No importa si se trata de un almuerzo con café o una comida o cena en condiciones, lo mejor es contratar un catering. Ayudarán a los organizadores a concentrarse en lo realmente importante, como es el desarrollo de las actividades y además, como existe una amplia oferta en el mercado, se puede elegir la compañía que más se adapte a las necesidades y al presupuesto de los organizadores.
Ten un plan B
Como organizadores de eventos, siempre hay que contar con un plan B, un por si acaso que puede salvar del desastre que, aunque no se prevé, puede suceder. Los imprevistos ocurren, así que si el servicio de catering falla, o un ponente no asiste, siempre hay que estar dispuesto a ofrecer una alternativa para que así los participantes en las actividades apenas noten la diferencia.