Fotografías: Luis Miguel Belda/Club Financiero Génova/TodoStartups
El embajador de República Dominicana en España, Aníbal de Castro, invita a los empresarios españoles a invertir en su país en sectores en crecimiento como el de la construcción, la educación, el agroindustrial o el de energías renovables, y no solo en el turismo, principal fuente de recursos, por otra parte.
De Castro hizo estas consideraciones durante el acto en el que fue distinguido como Socio de Honor por el Club Financiero Génova, a quien reconoce su gestión al frente de la misión diplomática por favorecer el marco de relaciones socioeconómicas entre ambos países.
En el evento que acogió la sede en Madrid del Club Financiero, que contó en calidad de anfitriones con la presencia de Arturo de las Heras y Antonio Garrido Lestache, miembros de su Junta Directiva, el embajador dominicano tuvo ocasión de exponer a los empresarios y directivos presentes las oportunidades de inversión en el país caribeño.
En su intervención, De Castro subrayó la “seguridad jurídica” que ofrece su país a potenciales inversores, los incentivos competitivos y un clima favorable de negocios, resultado de la estabilidad política de la que disfruta desde hace décadas el país que representa.
En este contexto, valoró la presencia española en el sector turístico, de modo que, en la actualidad, el 65% de las habitaciones de alta calificación son propiedad de grupos hoteleros españoles, como Piñero, Barceló, Riu, Globalia, Meliá u Occidental.
No obstante, aprovechó la ocasión para recalcar que República Dominicana es también fuente de oportunidades en otros sectores, como el de las energías renovables, sector que cuenta con la Ley de incentivos y exenciones fiscales de 2007; el agroindustrial, que incluye la producción de azúcar de caña, café o tabaco, o el de la construcción, sector que registró en 2014 un crecimiento del 13,8%.
El embajador dominicano enfatizó, así mismo, en el esfuerzo inversor en educación desarrollado por las administraciones públicas en los últimos años, sostenido en el tiempo gracias a un histórico pacto de estado al que llegaron todos los partidos con representación parlamentaria.
“Se ha apostado por una mayor atención a la inversión social, sobre todo en el sector educativo”, destacó De Castro, quien recordó que, por ley, el Gobierno debe invertir en esta materia el 4% del PIB. No dejó de lado la política fiscal “moderada” que caracteriza a su país, con una tasa de endeudamiento del 46% del PIB, “muy favorable en comparación con otros países de la región”, remachó.
Por su parte, Arturo de las Heras, en su doble condición de director general del Grupo Centro de Estudios Financieros (CEF.-) y la Universidad a Distancia de Madrid (UDIMA), aplaudió la capacidad inversora de República Dominicana en el sector educativo, lo que ha permitido en los últimos años que miles de jóvenes universitarios pudieran completar su formación con posgrados y másteres fuera de su país.
Resaltó también el esfuerzo de la Administración dominicana por formar a su personal docente y reformar su plan de estudios: “Sorprenden esas decisiones políticas a largo plazo, superior al de una legislatura, la generosidad de invertir a quince o veinte años”, destacó De las Heras.
Igualmente, Garrido Lestache, también miembro de la Junta Directiva del Club Financiero Génova, mostró su satisfacción por el creciente interés de los inversores españoles en sectores distintos al tradicional del turismo, como es el de la educación.